BENEDETTI  AL REVÉS

Si te rindes

 

Si decides que está bueno de batallar imposibles y sumar laceraciones

 

Si los benditos de tu causa te acusan, autorizándote con su calumnia a devolverles desprecio

 

Si la fatiga desborda tus nervios

 

Si lo vas perdiendo todo en la brega por conquistarlo todo para todos

 

Y te rindes, pero no te envileces, sino que simplemente te asumes como uno más de los tantos que simplemente luchan su supervivencia

 

Si, a la larga, recuperas un poco de lo mucho que pudiste por ti

 

Si te posicionas un tanto, y hasta sumas algo de grasa de más

 

Si ya no tenés cara de mártir, ni de redentor, que son casi lo mismo

 

Si el día transcurre sin más sobresaltos que los que nos tocan a todos, y te vas a acostumbrando a la opinión sin riesgos, al esfuerzo sin tiranías que quieran machacarte

 

Indudablemente lo estarás logrando

 

¿Que qué?

 

Bueno, un poco de bendita ingravidez, de liviano solaz y, por supuesto, de transacción

 

Pero la transacción no es mala per se

 

La transacción puede volverte sabio, prudente y hasta elegible

 

Mira hasta donde han llegado los ex-, si hasta gobiernan media patria grande, y hasta el imperio parece conforme con su pasado ya pasado

 

¿Por qué tú no?

 

¿Por qué te resistes, como si fuese pecado o, peor aún, traición?

 

No es cierto. Ya has escuchado el nuevo credo de los emergentes ex- radicales  decir: Quienes quieren todo, terminan por no cambiar nada y por estancarlo todo

 

Ellos, que vivieron tu presente, ahora os hablan con la incontestable verdad de sus altísimas investiduras recién logradas luego de sesudas y exitosas conciliaciones

 

¿Quién iban imaginar largas condenas convertidas en impensadas y solemnes exaltaciones?

 

El sistema es malo, pero tiene su lado amable donde es posible concertar hasta gobiernos de izquierda

 

¿Que qué izquierda?

 

Bueno, una izquierda sin balas, sin células clandestinas, pero con labia

 

Labia para decirle tantas cosas al imperio como solo se podía en los panfletos clandestinos

 

Ahora tenemos un Alba y una OEA alternativa, una telesur y hasta una moneda propia

 

¿Ves? ¡Cuándo se soñó tal realidad sin más tesón que deponer esa actitud que aún te cala, como si fuera apostasía abrirle camino a los cambios pacíficos, bonitos, democráticos!

 

Podrías preguntarte por las consecuencias de este nuevo espectro de la izquierda latinoamericana

 

Podrías dejarle al futuro la solidez y el parto  de tales conquistas, y simplemente abstenerte, es decir, asimilarte modesta y silenciosamente

 

Y estaría, también, bien, ..por ti

 

Porque aún puedes salvarte

 

 

JORGE EDUARDO SOTOMONTE GAMARRA